Historia.
La romanización fue bastante intensa a pesar de que Astures y Cántabros se unieron para luchar contra Roma. Los romanos aseguraron su dominio construyendo una calzada que unía "Lucus Asturum" con Cantabria. Restos de esta se han encontrado en Cangas de Onis, Corao, Llenín y Piedrahita; así como numerosas estelas funerarias pertenecientes a las tribus de vadinienses y orgenomescos. El cristianismo llegó en los últimos años de la ocupación romana.
El dominio visigodo no debió de tener demasiada trascendencia a pesar de algunos hallazgos como la mina de Milagro-Onís y Covadonga.
La Reconquista
El Reino de Asturias se origina después de la rebelión de los Astures y Cántabros, representados por el Rey Pelayo que vence a los musulmanes en la Batalla de Covadonga (año 722) e iniciando la Reconquista. Su primera capital será Cangas de Onís. A Pelayo le sucederá su hijo Favila, el cual funda el monasterio de Covadonga y en el año 737 manda construir la Capilla de Santa Cruz. La leyenda cuenta que Favila fue muerto por un oso en el lugar de Llueves. El sucesor de Favila, Alfonso I, amplía las fronteras del reino repoblando con cristianos que se establecen en Margolles y Triongo.
Posteriormente viene Fruela, quien será asesinado tras 11 años de reinado en el Palacio de Cangas de Onís. Aurelio y Silo sucedieron a Fruela y este último trasladó a Pravia la capital del reino. En 946 se cita "Kangas" como circunscripción civil y en 1115 se incluye al representante de Cangas entre los firmantes del Concilio de Oviedo. A instancia del Rey Felipe III comienza la transformación de Covadonga, pero tras un incendio en 1777 las pérdidas son catastróficas (joyas, imágenes, templo). Este hecho preocupa a Carlos III y manda construir un nuevo templo, mejora las comunicaciones y fomenta la industria y artesanía, incidiendo de forma muy positiva en la vida del Concejo.
Guerra de La Independencia.
En tiempos de la Guerra de la Independencia Cangas de Onís se convirtió en capital de uno de los gobiernos militares, presidido por Francisco Cortés Posada, que se forman en la provincia . Los franceses invaden varias veces el concejo; Corao, la iglesia de Abamia y la casa rectoral de la parroquia sirvieron de cuartel y centro de acción del general Bonet. Durante las Guerras Carlistas el coronel Arroyo ocupa estas tierras.
Siglos XIX y XX
En la segunda mitad del siglo XIX se mejoran las comunicaciones, se crea la Audiencia, es visitada por Isabel II y Alfonso XII, se crea la explotación minera de Buferrera y se construyen un tranvía de Arriondas a Cangas de Onís y la carretera de Covadonga a Los Lagos. Sin embargo también se produce el fenómeno de la emigración a América y cientos de cangueses van a Cuba. En esta época Cangas de Onís adquiere una gran importancia como centro judicial, comercial, militar e intelectual.
En 1908 se concede a Cangas de Onís el título de Ciudad, y en 1918 se crea en Parque nacional de la Montaña de Covadonga, hoy ampliado y Parque Nacional de Los Picos de Europa. A principios del siglo XX el concejo sigue teniendo en la agricultura y ganadería y los servicios su principal fuente de riqueza, pero ya empieza a despuntar el turismo, y Cangas de Onís, Covadonga y Los Lagos empiezan a ser un destino turístico de cierta importancia.
En 1909 se inaugura el Gran Hotel Pelayo en Covadonga. La segunda mitad del siglo el concejo empieza tímidamente a centrar sus objetivos en los fines turísticos, se crean fondas y hoteles y se mejoran las comunicaciones. El despegue definitivo del turismo en Cangas de Onís lo dan las etapas de la Vuelta Ciclista a España, que comienzan en 1983, y la visita del Papa Juan Pablo II a Covadonga y Los Lagos en 1990.
EL Papa Juan Pablo II pasea por la orilla del Lago Ercina (foto www.IglesiadeAsturias.org )